COMPORTAMIENTO

6 consejos para desarrollar la resiliencia en niños y adolescentes

 

Capítulos:

 

  1. ¿Qué es la resiliencia?
  2. ¿Cómo fomentar la resiliencia en niños?
  3. Ejemplos de resiliencia en los niños

 

Seguro que te gustaría que tu hijo nunca tuviera un problema y que no sufriera por nada. Por desgracia, parte de la vida es enfrentarse a ellos y salir lo más reforzado posible. Nadie aprende en cabeza ajena, por mucho que tú adviertas, tu hijo cometerá errores y vivirá contratiempos. Y tendrá que recuperarse

En estos dos últimos años los niños se han tenido que enfrentar a la pandemia y todos los cambios sociales que ha traído. Ha sido una situación difícil en la que ni siquiera los padres han podido ser una guía. La COVID-19 ha puesto a prueba la capacidad de resiliencia de todos.

Enseñar resiliencia a los niños no va a salvarles de las situaciones difíciles, pero sabrán reponerse de ellas y seguir adelante.

 

¿Qué es la resiliencia?

 

La palabra resiliencia tiene origen en la Física y se refiere a la capacidad de un material de recuperar su estado inicial cuando ha cesado la perturbación a la que ha estado sometido.

Esto ya nos da una pista de lo que nos referimos cuando hablamos de resiliencia en Psicología: Es la capacidad de adaptación de una persona a las situaciones adversas. Se trata, por tanto, de afrontar los contratiempos y salir fortalecido. 

No se debe confundir la resiliencia con optimismo o fortaleza. En los últimos años toda la filosofía Mr. Wonderful ha hecho que se tergiversen los términos. Resiliencia no es pensar que todo saldrá bien o que todo pasa por algo. Es aceptar que hay dificultades, saber pedir ayuda si es necesario y reponerse de la situación. Pero no como si nada hubiera pasado, sino integrándolo como parte de la vida. 💪

Es una capacidad, no un resultado. 

La resiliencia no es innata ni biológica. Sin embargo se puede aprender. Y el mejor momento es la niñez. Las conexiones afectivas y la autoestima facilitarán la resiliencia en los niños

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¿Cómo fomentar la resiliencia en niños?

 

Refuerza su autoestima

Una buena autoestima hará que a tu hijo le sea más fácil lidiar con las dificultades. 

Háblale de sus fortalezas, de cómo sabes que es capaz de afrontar el problema y resolverlo. Reconoce sus logros. 

Sé sincero. No es necesario que exageres y caigas en palabras fáciles. Tampoco lo presiones.

No subestimes sus sentimientos

Que a ti como adulto un problema te parezca que no tiene importancia, no significa que para tu hijo no la tenga. Entiende que se sienta mal o triste. 😥 Ayudarle a hablar de sus sentimientos reforzará su capacidad de resiliencia. El autoconocimiento es una parte muy importante para aprenderla. 

Apóyalo

En las situaciones difíciles y cuando tu hijo comete un error, lo que más necesita es tu apoyo.

Una charla con él le ayudará a buscar soluciones por sí mismo. Porque apoyo no significa intervención. Evitarle la situación a tu hijo no desarrollará su resiliencia, todo lo contrario. Considéralo parte de su aprendizaje.

Anímalo a pedir ayuda

Al hilo del punto anterior, tu hijo debe saber que puede confiar en ti, sentir que puede contar contigo en un momento de dificultad sin ser juzgado. Pedir ayuda no es una debilidad, sino una fortaleza. 

De otra forma, tratará de ocultar el problema y puede que nunca logre resolverlo. 

No hay mal que 100 años dure

Seguro que tu hijo está viviendo esa mala situación como el fin del mundo. Dejando aparte la mayor o menor gravedad del problema, dile que no durará para siempre. No está atrapado en algo infinito. ♾️

Con esfuerzo y buscando nuevas soluciones, las cosas terminarán mejorando.

¿Qué has aprendido?

Una vez que todo haya pasado, hazle esa pregunta. Comentad qué fue lo más difícil y cómo se superó. Si se da cuenta del proceso, la capacidad de resiliencia del niño aumentará y sabrá reponerse de otras situaciones futuras.

Enseñar resiliencia a los niños no va a salvarles de los momentos difíciles, pero sí a reponerse de ellos y seguir adelante. ⬆️

 

Ejemplos de resiliencia en los niños

 

Ana Frank

Ana Frank es la niña resiliente por antonomasia. Con tan solo 13 años pasó dos escondida huyendo de los nazis. De la forma más precaria, sin espacio, sin apenas comida y sin poder casi moverse. Ana pasó todo su confinamiento leyendo, estudiando y escribiendo su famoso diario, donde contaba su día a día y sus sentimientos. Fue capturada y llevada a un campo de concentración y terminó muriendo de fiebre tifoidea. 

A pesar de su trágica vida, Ana Frank es un ejemplo de resiliencia en niños porque hizo frente a todas las adversidades y las transformó en su diario. Siempre tuvo la ilusión de poder publicarlo.

El propio Nelson Madela cuenta que Ana Frank fue su referente durante los años de su cautiverio en Sudáfrica.

Malala Yousafzai

Malala es una chica pakistaní que solo quería tener la oportunidad de recibir una educación. Pero su país estaba gobernado por los talibanes, que prohibieron a las niñas asistir al colegio. Una mañana, cuando se dirigía a la escuela en autobús, recibió varios disparos en la frente que casi acaban con su vida. 

Cuando Malala se recuperó, lejos de amedrentarse, se convirtió en una activista de los derechos civiles, en concreto de los de las niñas. 

Malala no se hundió, no buscó venganza para sus verdugos. Siguió adelante, estudiando y formándose. Su ejemplo y su discurso ha calado en el mundo entero. Ha recibido infinidad de premios, entre ellos, el Nobel de la Paz. ☮️

Tu hijo

Sí, tu propio hijo. Porque ha dado un ejemplo de resiliencia en niños durante un largo confinamiento por la pandemia. Se ha adaptado a una nueva forma de aprender, de comunicarse con sus amigos. Y con todo, ha seguido adelante con su vida de niño. 👦

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