Ortodoncia en la infancia: ¿Cuándo poner brackets a un niño?

Capítulos:

1. Motivos por los que quizá deberías poner aparato a tu hijo
2. ¿A qué edad es recomendable poner brackets a los niños?
   
3. ¿Cuánto tarda el aparato en alinear los dientes?

La salud bucodental de los niños es un tema que preocupa cada vez más a los padres. Lo normal es empezar a llevar a tu hijo al dentista a partir de los 5 años. Detectar a tiempo problemas de dentición puede evitar contratiempos de salud en la edad adulta. 🩺

En una de estas revisiones, probablemente tu doctor te diga que tu hijo va a necesitar brackets. Si te fijas, es raro encontrar un niño que no los lleve en algún momento de su desarrollo. 

Aunque es un desembolso que no siempre viene bien, debes hacer caso a los profesionales cuando te recomienden poner los brackets a tu niño. Y no solo por una cuestión estética.

Motivos por los que quizá deberías poner aparato a tu hijo

El Ratoncito Pérez ya se llevó casi todos los dientes de tu hijo hace un tiempo. Un día lo ves sonreír y ¡oh,no! ¡Ha heredado tu boca! El caso es que él no tiene ningún complejo y tú lo ves muy gracioso. Hasta que en la consulta del ortodoncista te dicen que le tienes que poner aparato sí o sí. 🐭

A lo mejor tu caso no es tan dramático a simple vista. Pero si tu hijo no mastica bien la comida, puedes tener otro indicador de que los dientes no están en su lugar correcto.

Sabiendo que el diagnóstico lo debe dar siempre el especialista, los problemas que pueden corregir los brackets en los niños son:

• Dientes rotados o apiñados. No hay espacio para que salgan en su lugar y se juntan unos delante de otros. Además de no poder morder bien, tampoco la limpieza podrá ser la correcta.
• Diastema. Son dientes que están más separados de lo normal, dejando un hueco muy visible.
• Mordida cruzada o abierta. Que también impide que tu hijo pueda masticar bien. Además puede causar problemas en la mandíbula.
• Sonrisa gingival. La encía es más ancha y se ve mucho más de lo debido.
• Problemas de deglución. El aparato puede ayudar a recuperar la funcionalidad de la lengua.
• Malposición de los dientes. Lo más común. Por ejemplo, demasiado hacia afuera. 
• Factores hereditarios. ¿Llevaste brackets? Adivina quién más los llevará...

¿A qué edad es recomendable poner brackets a los niños?

La respuesta a la pregunta es depende. Desde la primera visita al odontólogo, este te puede decir ya si tu hijo va a necesitar backets. Pero eso no significa que se los vaya a poner en un corto periodo de tiempo.

El ortodoncista tiene que valorar el desarrollo de los huesos maxilares, si han salido o van a salir ya todos los dientes definitivos y si tu hijo puede tener algún problema de desarrollo facial.

Dependiendo de todo esto, puede recomendarte distintos tipos de tratamiento según la edad:

Tratamiento preventivo

Es el que se realiza en los niños más pequeños, los que aún tienen dientes de leche. Se usa para prevenir lo que podría convertirse en una malformación.

Suelen ser aparatos de quita y pon que se llevan tan solo unas horas al día, por ejemplo, para dormir. 💤

Tratamiento interceptivo

En este caso se lleva a cabo cuando todos los dientes definitivos ya han salido.  Aquí ya se pueden poner brackets y sistemas fijos.

Tratamiento correctivo

El más habitual. Se suele poner ya en la adolescencia, cuando el desarrollo dental ya se ha acabado. Se usa para corregir dientes mal posicionados. 

Resumiendo, la edad más temprana a a que un niño puede usar brackets son los 7-8 años. Lo normal es que el ortodoncista recomiende ponerlos al inicio de la adolescencia. 

Lo ideal es comenzar el tratamiento cuando el dentista lo sugiera, así se evitarán problemas cuanto antes. Pero los dientes se pueden corregir a lo largo de toda la vida.

¿Cuánto tarda el aparato en alinear los dientes?

El alineamiento de los dientes es un proceso que puede llegar a resultar muy lento. Hay que irlos moviendo poco a poco, de forma gradual. No hay una manera mágica para que de la noche a la mañana aparezca la dentadura perfecta. 

Ten en cuenta que los dientes están anclados en el hueso de la mandíbula. Para que la ortodoncia resulte efectiva, no los dañe y cause el menor dolor posible, se necesita tiempo. 

Calcula, en el mejor de los casos, que tu hijo va a lucir una sonrisa metálica por lo menos un año. Dependiendo del problema que se vaya a corregir, se puede alargar un par de años más.

Mucha paciencia. Quitarlos antes de tiempo hará que todo el tratamiento y el dinero invertido no sirva de nada. Volverán a descolocarse.

Después de quitar los brackets, tu hijo deberá llevar un tiempo más un sistema de retención para que se fijen definitivamente. 

El camino es largo, pero el resultado merecerá la pena. Y no solo por la estética, también por los problemas de salud que una dentadura mal formada causa.